Ingeniero de procesos en BASF SONATRACH PropanChem
Jordi Salvat
11/11/2022
Graduado en Ingeniería Química por la Universitat Rovira i Virgili, este tarraconense nacido en 1990 es actualmente Ingeniero de Procesos en BASF SONATRACH PropanChem. Antes había trabajado en Bayer, Dynasol y Dow.

«El principal objetivo en los primeros meses y años de trabajo es adquirir criterio, trabajar de forma humilde».
¿Por qué decidió estudiar Ingeniería Química en la URV?
La decisión de qué estudiar siempre es complicada. En mi caso, tomé la decisión en base a lo que se me daba bien y las salidas laborales del sector. Tenía facilidad por las asignaturas de ciencias y siempre he sido una persona curiosa y analista, de modo que una ingeniería era una buena opción. Finalmente me decidí por la ingeniería química por mi interés en el sector.
¿Cómo fue la experiencia Erasmus en Bélgica?
Fue una experiencia muy positiva. Al ser de Tarragona y estudiar también en Tarragona, era importante salir de mi zona de confort. La experiencia del Erasmus era un reto interesante que me ayudó a crecer y a “espabilarme”. Además, por el tema del idioma, me vino muy bien para perfeccionar mi inglés, ya que las asignaturas que cursaba se realizaban en inglés.
¿Hay mucha diferencia con las universidades de aquí?
La verdad es que sí. Un punto que me sorprendió fue que muchas asignaturas, aun siendo técnicas, tenían exámenes orales. Por mi parte, en la carrera, era la primera vez que realizaba un examen tipo oral. Por lo general, los exámenes en carreras de ingeniería suelen ser escritos, a excepción de las presentaciones.
En estos momentos, en BASF desarrollo un rol en seguridad de proceso e ingeniero de mejoras de la planta de PDH
Estuvo trabajando en Bayer mientras todavía estudiaba. ¿Qué le aportó?
La URV te facilita herramientas para poder participar en el mundo laboral aun estudiando. Por ejemplo, las prácticas curriculares o el proyecto de final de carrera, que se puede realizar asociado a una empresa. En mi caso, traté de aprovechar todas estas oportunidades para tener experiencia laboral antes de finalizar la carrera. En mi primera experiencia como estudiante en prácticas, me fijé mucho en la dinámica de trabajo de la empresa, como están organizados por departamentos, la profesionalidad de los trabajadores, etc. Fue más enriquecedor en estos aspectos que en la parte técnica de las tareas que desarrollaba en ese momento.
Y su primer trabajo después de graduarse fue en BASF.
Así es, una vez finalicé la carrera universitaria, mi primera experiencia fue en BASF, como becario, en el departamento de procesos. Por un lado, me permitió aplicar los conocimientos adquiridos en la universidad y por otro, aprender de los profesionales que me rodeaban. El principal objetivo en los primeros meses y años de trabajo es adquirir criterio. Al final, se trata de trabajar de forma humilde, escuchar, atender, ver como se toman las decisiones y tratar de ayudar en la medida de los posible.
En 2014 se incorpora en la planta de Dynasol Elastomers de Repsol en Cantabria en el área de producción. ¿Cómo fue esta experiencia?
Me incorporé a mediados de 2014 como técnico de producción en la planta de caucho sintético. Fue una experiencia de maduración profesional y personal. Mis responsabilidades estaban relacionadas con la gestión de la producción, operación de la planta, coordinación con mantenimiento, supervisión de trabajos, etc. Un punto muy positivo es que, al estar en producción, estás afectado por todos los departamentos que lo rodean (seguridad, calidad, proceso, mantenimiento, etc.) de modo que el radio de aprendizaje es muy amplio. Esta experiencia me permitió aprender de todas las ramas de un entorno productivo.
Después de tres años vuelve a Tarragona, donde se incorpora otra vez a un departamento de Ingeniería.
Me salió la oportunidad de cambiar de área, de producción a ingeniería y, por lo tanto, de una posición muy técnica a una posición orientada a la gestión de proyectos. Me incorporé como Ingeniero de Proyectos en Technip FMC, trabajando para proyectos en Dow Chemical. Fue una experiencia muy positiva y dinámica, donde coincidí con grandes profesionales del sector. Este cambio me permitió desarrollar mi perfil en gestión de equipos y proyectos.
Y en 2018 inicia su segunda etapa en BASF. Cual están siendo sus tareas estos últimos años.
Me incorporé en 2018 para unirme al equipo del proyecto Debottlenecking, cuyo objetivo fue incrementar la producción de la planta de PDH de BASF SONATRACH PorpanChem. Mis tareas estaban orientadas a la definición de los proyectos y diseño de equipos e instalaciones. En estos momentos desarrollo un rol en seguridad de proceso e ingeniero de mejoras de la planta de PDH. Por un lado, participo en temas de análisis de seguridad de la planta y por otro, trabajo en equipo en el desarrollo de nuevos retos y oportunidades de mejora. Tengo la suerte de trabajar con un equipo muy profesional, en una gran empresa, con capacidad para desarrollar cualquier idea de cara a continuar creciendo de una forma sostenible.
Haber formado parte del equipo de trabajo de grandes empresas del polígono te da mucha perspectiva
¿Qué le ha aportado haber trabajado en las grandes empresas del polígono petroquímico de Tarragona?
Haber formado parte del equipo de trabajo de grandes empresas del polígono te da mucha perspectiva. Cada empresa tiene una dinámica de trabajo diferente y tienes que adaptarte a su forma de trabajar. En este sentido, el cambio te aporta experiencia, conocimiento, criterio. Por otro lado, coincides con grandes profesionales del sector, de los cuales aprendes, compartes experiencias… Todo ello contribuye a tu crecimiento personal y profesional.
¿El Covid-19 o la Guerra de Ucrania ha afectado mucho en el día a día?
En lo referente al Covid-19, la empresa tuvo una respuesta ágil para implementar medidas preventivas, que, junto al compromiso de todos los empleados, permitió reducir los efectos de la pandemia. A nivel personal, el Covid-19 supuso un cambio importante en la dinámica de trabajo y comunicación.
Por otro lado, la guerra de Ucrania ha generado un movimiento muy brusco en los precios y coste de las energías. Este hecho está siendo un reto de cara a operar las plantas de una forma mucho más eficiente. Como punto positivo, están saliendo medidas para reducir y optimizar el uso de la energía, que, a su vez, genera también reducciones en las emisiones de CO2. Como se está viendo en los últimos años, cada vez más, el entrono exige que las empresas sean ágiles en el cambio.
¿Cómo ve el futuro del polígono químico de Tarragona en un contexto globalizado como el actual?
El polígono petroquímico de Tarragona está formado por un gran número empresas y plantas productivas. Esta situación permite crear sinergias, no solo en la propia empresa, si no con el resto que lo conforman. Esto genera una ventaja que debemos aprovechar para ser más competitivos.
En este sentido, en mi opinión, el futuro del polígono petroquímico pasa por aprovechar estas sinergias entre empresas, de cara a optimizar recursos y crear oportunidades de negocio para cubrir nuevas necesidades.
Los próximos años vienen retos muy interesantes con la transición energética y la reducción de las emisiones de CO2
¿Qué consejo o recomendación le daría a una persona que ahora asuma un cargo parecido al suyo en la industria química?
Mi primer consejo sería que escuche y aprenda mucho y sobre todo, que pregunte y sea curioso. Con estos ingredientes y una buena actitud, creo que, tanto en un cargo parecido al mío como en cualquier otro cargo, tendrá muy buenos resultados.
¿Cómo prevé su futuro laboral?
Los próximos años vienen retos muy interesantes con la transición energética y la reducción de las emisiones de CO2. En este sentido preveo un futuro bastante entretenido y con ganas de afrontar estos cambios.
Una Joint Venture entre por BASF i SONATRACH
BASF SONATRACH PropanChem S.A. es una Joint Venture participada por BASF (51%) y la empresa argelina de petróleo y gas SONATRACH (49%). Se constituyó el 20 de enero de 2000 para llevar a cabo la construcción y operación de una planta de deshidrogenación de propano (PDH) para producir propileno. El propano se importa de Argelia a través de SONATRACH. La planta se puso en marcha en enero de 2003 y suministra el propileno a otras empresas del polígono químico para producir principalmente polipropileno.